Tener una buena previsión de escenarios te ayuda a evitar los riesgos en tu empresa. Lo que significa que podrás tener soluciones a un posible problema que pueda surgir en el futuro. Se deben preparar múltiples escenarios antes de una crisis. La idea es preverlo antes de estar atravesando. Por ello, te contamos cómo hacer una buena previsión de escenarios: predice tu tesorería.
Tener el peor escenario, te ayudará a saber cómo actuar, o qué acciones vamos a tomar, antes de que la crisis se convierta en realidad, nos permite prepararnos para tomar las mejores alternativas. Este tipo de gestión de flujo de caja es esencial para adelantarnos a las reservas de efectivo.
Preparar múltiples escenarios de flujo de caja con distintas situaciones hipotéticas ayuda a pensar las consecuencias de diferentes decisiones y qué impacto tienen en la tesorería.
Te mencionaremos tres, que te pueden ayudar a tener un punto de partida.
La cantidad ideal de escenarios financieros
- Un escenario optimista: Espera que los números mejores En el caso de que todo salga mejor de lo que se espera
- Un escenario pesimista: Piensa en el peor escenario y que los objetivos planteados no se cumplan.
- Un escenario realista: Basado en los datos y análisis tiene una perspectiva de lo que podría pasar.
Algunas consideraciones importantes para tener en cuenta para crear nuevos escenarios de anticipación:
- Siempre habrá factores que no puedas evitar, porque estarán fuera de tu control por ende no podrás anticipar.
- Tener el conocimiento previo sobre la crisis económica, sabrás cómo afrontar de la mejor manera la situación.
- Se pueden producir situaciones nuevas, como la COVID-19, que hacen que la incertidumbre se genere y no tengamos control de ellas.
- El mundo tiene muchos aspectos y el socioeconómico es muy importante, ya que afecta de manera directa a nuestra empresa. Estar actualizados ayudará a prever algunos escenarios negativos.
Previsión de escenarios: predice tu tesorería
Para finalizar te mencionaremos 3 escenarios que pueden identificar que tu tesorería tiene problemas.
1. Eres demasiado optimista con los plazos de pago de tus clientes: No pueden garantizar la entrada de dinero a tu caja, entonces el escenario se caería por el lado de los ingresos: Facturación y los pagos por parte de los clientes. Casi siempre se piensa que los plazos de pago son a 90 días en vez de 60. Esto puede ayudar a estimar las cantidades de efectivo y tener más tiempo de hacer ajustes. Pero no es la solución exacta, porque pueden haber clientes morosos que hagan que tu caja no tenga lo suficiente para realizar los pagos necesarios y genere un problema en la tesorería.
2. Tienes problemas con tu inventario: Al no tener el stock necesario, se puede dejar de recibir el dinero y no poder cumplir con los objetivos planteados. Además de incumplir con los clientes y quedar mal como proveedores. Lo que genera problemas en la caja por incumplir contratos establecidos.
3. Los cobros pendientes son demasiado altos: Si tienes una cartera muy grande por cobrar, es posible que no estés actuando de manera eficiente en el cobro, lo que genera una falta de efectivo, es decir un problema en el flujo de caja, porque se generan más gastos que ingresos.
Prueba Orama sin compromiso y podrás realizar simulación de escenarios en base a tus previsiones financieras. No te pillará nunca más la falta de liquidez por sorpresa debido a una mala gestión de la tesorería.