Necesitas una visión realista de tus próximos ingresos
Una de las partes más importantes de tu previsión de tesorería es tener unos ingresos lo más realistas posibles, y para ello deberás hablar con tus clientes para entender cómo les está afectando la pandemia y si podrán pagarte. Los puntos principales a aclarar con ellos son:
¿Están en una situación en la que podrán realizar pagos a proveedores?
¿Cuánto van a poder pagarte?
¿En qué fecha podrán pagar? ¿Se retrasarán? ¿Días, semanas, meses?
¿Tienen pensado seguir comprándote? ¿Cuánto y cuándo aproximadamente?
Quizás no consigas toda la información, pero a nada que te desvelen su situación y algún otro punto, esto te ayudará a posicionar el cobro correctamente en tus previsiones y tener una visión más realista de cuánto dinero tendrá tu negocio en los próximos meses.
¿Qué hacer si la situación de tus clientes no es la deseada?
En caso de que un cliente estén teniendo dificultades debido al COVID, como última opción puedes plantearte ofrecerle un plan de pagos diferido, o incluso descuentos, asegurando siempre que esto sea a cambio de un cumplimiento exhaustivo de las nuevas condiciones pactadas. De esta forma, te posicionas como proveedor prioritario para el pago. Más vale pájaro en mano…
Una vez hayas actualizado las previsiones de cobro de tus clientes, podrás tener una visión más clara de tu tesorería futura, y cuándo podrás pagar a tus proveedores. Ahora es momento de llamarles a ellos.